"Un ejemplo concreto: ¿cuál de los chinos de la foto (ver blog) es mi vecino y cuál el camarero de la cafetería de al lado? La verdad es que al principio me hacía gracia no diferenciarlos, pero acaba jodiendo el pedirle constantemente cafés a tu vecino pensando que es el camarero, sobre todo porque nunca acabas consiguiendo el café." El post, aunque en clave de humor, ofrece una explicación lógica a ese fenómeno por el cual a los europeos les cuesta tando distinguir a los chinos entre sí, y viceversa. Muy recomendable
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