"Cada noche compruebo si tengo más arrugas y si veo alguna quiero más inyecciones", apunta la niña, a la que también le hace la cera.Una mujer británica, esteticista de profesión, tiene la curiosa afición de retocar con bótox a su hija, de ocho años, cada tres meses. Frente, labios y el contorno de los ojos han sido sus objetivos hasta ahora sin olvidar que le hace la cera para eliminar el poco vello corporal que pueda tener. "Lo hago para ayudarla a convertirse en una estrella", asegura la madre.
|
etiquetas: madre británica , 8 años , bótox