(c&p) “Nadie tiraría una bomba nuclear en un país donde estarían de visita sus hijos o sus nietos.” …O al menos, nadie que pudiera entrar en el imaginario de un niño. La idea para evitar un cataclismo nuclear era tan simple como “descabellada”: había que organizar un intercambio cultural temporal de nietos o hasta hijos entre los líderes de los bandos enemigos, y el posible ataque nuclear se vería bloqueado. La iniciativa, sólo pudo nacer y prosperar en la mente de una niña de franca sonrisa y puro idealismo: Samantha Smith.
|
etiquetas: guerra fría , samantha smith , carta