Tengo 45 años. Peso 90 kilos. Mido 1,80. Hoy, después de no hacer ejercicio sistemático desde hace dos décadas, salgo a correr. No lo hago sin informarme ni consultar. Internet y las personas que me quieren me informan: eres viejo y gordo (yo me veo joven y esbelto) así que ve con cuidado. Vigila las rodillas. Se supone que debo andar cinco minutos y correr uno. Y repetir el proceso tres o cuatro veces. Andar, bien. Corro un minuto. Ando. Corro otro minuto y pico. Me agoto. Vuelvo a casa. Me duele mucho la pierna izquierda.