Muy importante tuvo que ser este agente para que de él se hayan escrito libros, filmado varias películas, tenga una novela gráfica y hasta un sello de correos con su cara, por no hablar de una lancha rápida de la Marina del Pueblo de la República Democrática Alemana que también fue bautizada con su nombre. Una relevancia la de este hombre que, como suele ocurrir, no fue acorde con su suerte. Le ahorcaron sin que sus jefes movieran un dedo por salvarlo pese a las ofertas de canjearlo por otros prisioneros que se recibieron.
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