El Consell está estudiando muy seriamente la la opción de crear un único conglomerado audiovisual que agrupara la CCMA y RTVV. La crisis parece que es capaz de mover montañas y, incluso, ayudar a aparcar catalonofòbia que el PP ha alimentado tradicionalmente al sur del Sènia. Más concretamente están los problemas de liquidez de la Generalitat valenciana, una realidad que también imposibilita el saneamiento-vía ERE masivo-de Canal9, lo que, a su vez, hace inviable el que hasta ahora era el objetivo principal popularista, su privatización.