Maquiavelo lo formuló: "El orden político tiene como finalidad mantener el Estado" (y sus servicios, como la seguridad ciudadana) y para hacerlo, mientras haya criminales, no basta la bondad: hay que internarse por "la senda del mal". Ignatieff ha dado una versión actual: "Los valores éticos no son relativos, lo que es relativo son las condiciones reales de su aplicabilidad. Como nunca van a cumplirlos en su totalidad, el principal problema ético de las democracias es justificar continua y rigurosamente esos incumplimientos cuando se producen"