Alberto nunca pensó que un día acabaría ganándose la vida con la bicicleta como su tocayo Contador, aunque de una forma muy diferentes. Los dos son jornaleros del pedal, pero con unos perfiles muy alejados y unos sueldos que se sitúan en las antípodas del mercado. Alberto Roca Pérez de Nanclares trabaja repartiendo sobres y pequeños paquetes por las calles de Bilbao, mientras que Alberto Contador escruta carreteras para luego subirse a los podios.