edición general
6 meneos
 

Verano en Prenzlauerberg

Observa el escritor Peter Schneider, un incondicional de Berlín, que la ciudad no tiene apenas lugares en los que la vista pueda reposar ante la visión de algo bello. Es verdad. Berlín no es monumental, ni bonita, sus encantos vienen por otro lado. Ni la sofisticación ni el refinamiento en el vivir cotidiano son rasgos distintivos alemanes. La buena vida es la de “Dios en Francia”, dice el refrán alemán. Y Berlín, no es París. A sus 3,5 millones de habitantes, le faltan quizá otros dos millones para poblar su vacía enormidad, hasta alcanzar esa

| etiquetas: prenzlauerberg , alemania

menéame