Ordenadas en orden de aparición, con copypastes de los versículos y referencias. Cada una ordenada en grupos indicando su contradicción. PD: Yo de pequeño era católico y estudié en colegio de curas, no me habré pasado horas en catequesis (sin que nadie me hiciera tocamientos por suerte)
#35 Dudo que hayas visto intereconomía más de 10 minutos, yo veo de vez en cuando el gato al agua, que es de lo mejorcito que se puede ver algunas noches, y me parecen que dicen cosas de sentido común y bastante equilibradas, el problema es que ponen el dedo en la llaga, no se andan con policorrectismos superfluos y eso escandaliza a muchos bienpensantes.
#4 Si disponen del típico cartel de "zona videovigilada" con los datos donde poder ejercitar los derechos de acceso pueden estar al borde de la legalidad. A ese cartelito le debe acompañar (aunque no esté a disposición del público) toda la documentación referida a la aplicación de la LOPD del establecimiento, es decir:
- Documento de Seguridad de los ficheros
- Registros de alta en la AEPD
- etc.
La disyuntiva es cual es el fin declarado en el momento de dar de alta el fichero asociado a las grabaciones. Si es simplemente el mantenimiento de la seguridad, desde mi punto de vista (totalmente discutible) podría estar fuera del alcance y por lo tanto no sería legal salvo que te pidiesen tu consentimiento por escrito previamente.
Esto se debe a que las cámaras de videovigilancia están amparadas por la Ley de Seguridad y solo es aplicable a eso, a la seguridad. Por un lado se puede plantear que la grabación que haga un usuario de la película (para subirla al emule, p.ej.) puede ser una infracción similar al usuario que roba en un establecimiento. Si esta es la aplicación no hay nada que hacer, con que el cine tenga el cartelito bien visible a la entrada y toda la documentación legal de la LOPD, lo tienen cubierto legalmente.
Por otro lado, si entendemos que esa grabación no supone la comisión de ninguna infracción/delito (que lo dudo), entonces grabar a los usuarios requeriría de su consentimiento expreso.
Donde si está muy claro la ilegalidad (en función de cómo se haga) es en el siguiente aspecto que comenta el artículo:
lo van a hacer para “mejorar” la industria cinematográfica, dedicándose a grabar nuestras reacciones, gestos, cara, atención y movimientos. Mola pagar una pasta por la entrada para que luego encima te espíen.
Que te graben tu cara para ver las emociones que tienes está absolutamente fuera de la LOPD si previamente no te han informado de que se va a hacer con esas grabaciones, que finalidad tienen, quienes son los destinatarios de esas grabaciones y además han requerido tu consentimiento informado y por escrito. Aquí no tengo ni la menor duda.
Tu cara es un dato de caracter personal, grabarte con otro fin que no sea la seguridad supone un fin distinto al de la seguridad y por lo tanto no cabe la aplicación de la Ley de seguridad como "eximente" al requerimiento del consentimiento informado.
Espero haber alcarado algo la situación.
Desde mi punto de vista lo llevan pelín crudo con la LOPD, aunque ya se sabe, luego viene el Supremo y les permite hacer cualquier barrabasada (como lo de grabar en las bodas y establecer que no existe fichero para que se puedan ir de rositas)
perrocimarron.blogspot.com/2009/02/el-desarrollo-del-hombre-decia-el-s Mi blog personal, donde recojo la opinión (impresionantemente certera, en mi opinión) de Gurdjieff, un "magufo" muy curioso de principios de siglo, sobre este asunto. A mi me impresiona, y aunque este hombre pudo estar equivocado en muchas cosas, hay otras en que la clava.
"—El desarrollo del hombre, decía él, se opera a lo largo de dos líneas: «saber» y «ser». Para que la evolución se realice correctamente, ambas líneas deben avanzar juntas, paralelas una a otra y sosteniéndose una a otra. Si la línea del saber sobrepasa demasiado a la del ser, o si la línea del ser sobrepasa demasiado a la del saber, el desarrollo del hombre no puede hacerse regularmente; tarde o temprano tiene que detenerse. "La gente capta lo que debe entenderse por «saber». Reconocen la posibilidad de diferentes niveles de saber: comprenden que el saber puede ser más o menos elevado, es decir, de más o menos buena calidad. Pero esta comprensión no la aplican al ser. Para ellos, el ser designa simplemente «la existencia», que ellos oponen a la «no existencia». No comprenden que el ser puede situarse a niveles muy diferentes, incluir varias categorías. Tomen, por ejemplo, el ser de un mineral y el ser de una planta. Son dos seres diferentes. El ser de una planta y el de un animal, son también dos seres diferentes. Igualmente lo son el ser de un animal y el ser de un hombre. Pero dos hombres pueden diferir en su ser más aún que un mineral y un animal. Esto es exactamente lo que la gente no capta. Ellos no comprenden que el saber depende del ser. Y no solamente no lo comprenden, sino que no quieren comprenderlo. En la civilización occidental en particular, se admite que un hombre pueda poseer un saber vasto, que pueda ser por ejemplo un sabio eminente, autor de grandes descubrimientos, un hombre que hace progresar la ciencia, y que al mismo tiempo pueda ser, y tiene el derecho de ser, un pobre hombre egoísta, discutidor, mezquino, envidioso, vanidoso, ingenuo y distraído. Parece que aquí se considera que un profesor tiene que olvidar en todas partes su paraguas. "Y sin embargo, tal es su ser. Pero en Occidente se estima que el saber de un hombre no depende de su ser. La gente da mayor valor al saber, pero no sabe darle al ser un valor igual, y no tiene vergüenza del nivel inferior de su propio ser. Ni siquiera comprende lo que esto quiere decir. Nadie comprende que el grado del saber de un hombre es función del grado de su ser.