#6 es lo que tiene que seamos tantos miles de millones de personas, no hay recursos para todos. Si fuesemos, que se yo, cien millones, podríamos vivir a todo tren sin problemas
#154 desplazarse si que un lujo, un lujo que nuestro planeta está pagando con creces. La tontería de irse un finde a Londres o a hacerse la fotito a 300km y volver. Claro que hay que subir los impuestos al transporte, mucho. Pero también que puedas desgravarlo si lo haces por trabajo. Lo malo es que después llegaran los millones de autónomos a hacer trampitas, como siempre.
#5 Yo lo que propongo es que a cada distrito le corresponda un colegio. Si vives en la calle "X", te toca el colegio "X". Si quieres llevar a tus hijos al colegio "Y", te vas a vivir el barrio "Y".
Lo que no puede ser es que, yo viviendo en el barrio "X", y queriendo llevar a mi hija al colegio "X", me quede sin plaza porque alguien del barrio "Y" quiera venir a mi colegio.
#5 Propongo una red de colegios públicos prioritaria con rutas escolares y no ceder terrenos públicos a empresas privadas para hacer negocio con la educación. Filtrar los conciertos educativos y concederlos a aquellos que sean estrictamente necesarios por falta de oferta pública (a menos de ¿dos kilómetros, por ejemplo? y cumplan con una ley marco de consenso, estatal, que deje poco margen a los políticos en general y a los de las comunidades autónomas en particular, para reirse de todos los ciudadanos, principalmente de aquellos que no votan y están en edad de formarse (o deformarse, o amaestrarse, o como lo quieras llamar).
#62sin embargo la educación bilingüe si es lengua coofical-castellano no da ningún problema. ¿Nos lo tenemos que creer?
Sí me lo creo porque un niño que escuche catalán y español en casa, catalán y español en la tele, y que tenga un profesor que habla catalán de verdad y bien, y otro que habla español de verdad y bien, va a aprender bien ambos idiomas. Mientras que el problema del sistema bilingüe es que en lugar de contratar a gente que supiera inglés, aceptaban cualquier título de mierda, como un B2 de Trinity, o incluso del deleznable Aptis. Con profesores que NO pronuncian ni hablan ni usan bien el inglés, el niño no va a aprender correctamente.
#125 no necesito hacer trampas. Mi experiencia es que todos los son. Por no mencionar el hecho de que pueden vivir inmersos en entornos en los que el idioma se hable con mucha frecuencia.
#11 Y por qué no? en Suiza se hacen varios referendums al año para ratificar leyes.
Ya sé que es raro en democracia eso de que la gente participe en cómo quiere que su país vaya tomando forma más allá del típico "cada cuatro años tú me votas y yo te engaño"...... pero igual algún día habría que probarlo.
#62 No da ningún problema porque los profesores son hablantes nativos con todos los recursos necesarios para modificar los mensajes hasta que se entiendan. #69 lo expresa perfectamente: es la capacidad comunicativa del profesor lo que garantiza el éxito de un programa de inmersión.
#62 No es comparable el impartir una assignatura en un idioma extranjero (como puede ser el inglés o, en algunos centros, el francés) con hacerlo en uno cooficial. La principal diferencia es que en el caso de las lenguas cooficiales éstas se suelen utilizar de forma habitual en el entorno (família, amigos, medios de comunicació, etc) mientras que las extranjeras no. En el caso de Catalunya (asumo que es del que hablas) además, las gramaticales y léxicas entre ambas son mínimas, por lo que su comprensión es mayor que en inglés, con normas gramaticales distintas y un léxico que proviene de otra família lingüística. Es cierto que durante las primeras etapa educativas los niños y niñas suelen mezclar ambas lenguas e inventarse palabras al no conocer la traducción correcta, pero con el tiempo se suelen acabar dominando bién las dos, tanto a nivell conversacional cómo para elaborar textos técnicos, aunque esto también depende de otros factores (entorno, profesorado, etc)
#62 Me temo que problemas, más graves o no, siempre aparecerán. Aun así, no creo que sea equivalente a que pase en un idioma que puedes practicar y en el que estás inmerso fuera de clases. Aquí hablamos de inglés, que por lo general solo lo podrás practicar en clase.