En realidad, #5, eso pasa con todos (o casi todos) los gobiernos.
“Nada hay en el ordenamiento jurídico español -ni lógicamente, tampoco en las convenciones internacionales de las que forma parte España- que atribuya a Amnistía Internacional la autoridad para dictaminar qué Estados incumplen qué derechos. Su opinión puede tener valor moral (...) Es una opinión política en la medida en que juzga determinadas políticas”. Subdirección General de Medios Audiovisuales, 2008, sobre la negación de “exención de cómputo” para la campaña publicitaria El poder de tu voz, que impide la emisión gratuita de este anuncio en televisiones.
“Amnistía, al criticar las acciones de Hizbolá junto con las de Israel, ha tratado de equiparar al verdugo con la víctima”.
Hassan Fadlallah, miembro de Hizbolá, 2006, tras la denuncia de AI sobre las violaciones de derechos humanos cometidas por Hizbolá en el conflicto del Líbano, con ataques indiscriminados sobre la población civil. En esa época, también se denunciaron los cometidos por Israel.
“No admitimos las críticas de Amnistía Internacional, ya que Estados Unidos es un destacado defensor de la protección de los derechos humanos y continuaremos siéndolo (…) La guerra contra el terrorismo ha tenido como resultado la liberación de 50 millones de personas en Afganistán e Irak, así como la protección de sus derechos".
Scott McClellan, portavoz de la Casa Blanca, 2004, tras la presentación del Informe Anual en el que se acusa a EEUU de mantener una política exterior sin principios y de hacer del mundo un lugar más peligroso, con motivo de la “guerra contra el terror”.
“Amnistía está propagando la desinformación para continuar haciendo daño a Liberia, Amnistía es un brazo propagandístico del gobierno británico”.
Charles Taylor, Presidente de Liberia, 2001, por los informes sobre violaciones de derechos humanos durante el Gobierno de Taylor, al que se está juzgando por… » ver todo el comentario
Lo tuyo ya roza lo patologico.