La justicia española necesita más jueces como Garzón. Jueces
a) Que congelen casos cuando sea necesario (caso Faisán), pero que pueda descogelar si las condiciones cambián (por ejemplo, que se sienta despechado: caso Gal).
b) Que escuche las conversaciones privadas de abogado e implicado, sea quién sea el abogado, saltándose a la torera la conficiencialidad abogado-acusado.
c) Que aplique leyes de amnistía (Carrillo-Paracuello) o no (Franquismo) según le parezca
d) Que pida dinero a empresas que juzgará en unos meses (Santander, aka "querido Emilio"), un delito fragante de cohecho impropio.
e) Que mire para otro lado cuando interese ¿Detenciones a Eta?
f) Que quiera juzgar a algunos dictadores (Pinochet), a otros no (Castro), y luego no tenga problema en invitar a una cena homenaje al principal instigador de todas las horribles dictaduras del cono sur (Kissinger)
g) que guste de maniobras como detener a gente un viernes por la tarde, irse de cacería el fin de semana, y brindar con destacados dirigentes socialistas sobre lo bien que pinta su labor. Mientras los detenidos han de pasar 72 horas en el calabozo porque no les toma declaración hasta el lunes.
Estos es lo que necesitamos. Jueces comprometidos.... en medrar política y económicamente.
El ser humano, al contrario de lo que se cree, está programado para no pensar. Pretender que la gente se plantee siquiera que su opinión puede no ser totalmente acertada lleva a un proceso de reflexión demasiado complejo para la mayoría. En general las posturas extremas son las más cómodas y fáciles de defender a costa de cabezazos contra la pared. En cuanto se entra en el terreno de la mesura y la autocrítica... diarrea mental a razón de litros por segundo. Es lo que hay, y por tanto es lo que se lee.