#2 Para mí madrugar es levantarse temprano, pero bien, con sus facultades más o menos intactas. Lo otro es cortar de un tajo un proceso biológico vital, es como levantarse del retrete a medio proceso, con la deposición todavía colgando.
Que no se olviden de membretear todos los paquetes de comida con el correspondiente sello para que les quede clara su procedencia y a quién deben rendir pleitesía.
No ha estado fino el manuel con el letrero: "¡Exigimos! Basta de especulación, trabajo estable, sueldos dignos, justicia social." Leído así, es una pancarta que deberían sostener los saltarines ricachones del segundo plano.
Por desgracia, las posibilidades de estafar en línea, tanto telefónica como de internet, son enormes. A mí me llegó de una hermana en la que confío un mensaje que me redirigía a "oficinaempleo.com", y resultó ser una empresa que recopilaba currículums para sacarles toda la información sensible y vendérsela a empresas de spam.
#68 Como he dicho, mi sobrina no tenía noción de propiedad, y ni yo ni sus padres se lo habíamos conculcado, ya habría tiempo para eso, así que el niño egoísta cogía sus juguetes sin ningún problema. El problema era cuando mi sobrina cogía algún juguete suyo, y él no se lo dejaba, quitándoselo en ocasiones de las manos con brusquedad.
MI paciencia se agotó intentando hacerle ver durante algunos días lo impropio de su conducta, así que acabé poniéndome delante del niño egoísta cuando quería coger el triciclo de mi sobrina, repitiendo una y otra vez: "no, lo siento, tú no dejas a (nombre de mi sobrina) jugar con tus juguetes, yo no te dejo jugar con su triciclo". No creo que eso sea "forzar".
Yo recuerdo de cuando llevaba a mi sobrina, recién aprendiendo a andar, al parque a jugar con otros niños. Llevaba sus propios juguetes: una muñeca, una pelota y el propio carrito, que se transformaba en un triciclo cómodo y molón. Estábamos un buen rato, y cuando llegaba la hora de comer, cada uno a su casa.
Pues bien, yo al principio creía que todos los niños eran iguales, que compartían los juguetes sin ningún problema, estaban en la edad en que supuestamente no sabían qué era ser egoísta y no dejar que otros niños jugaran con tus juguetes de la misma forma que podía jugar con los de los demás. Pero transcurrían los días, y empecé a darme cuenta de que había un niño que quitaba los juguetes a mi sobrina, hasta el punto de venir corriendo en una ocasión desde la otra punta del terreno de juegos (unos 15-20 metros) a quitarle expresamente el juguete a mi sobrina. Ella se quedaba con los brazos alzados, mirando en derredor y pensando en qué hacer, cogía otra cosa y seguía jugando. Aquello me alteró un poco, lo suficiente como para vigilar al pequeño cabrón e impedirle que tomara el triciclo de mi sobrina para conducirlo él.
Los padres se reunían más allá a hablar entre ellos, yo, junto con otras dos madres, me quedaba entre los niños vigilándolos que no pasara nada malo. Nunca supe quién era el que traía a ese elemento, más que nada por no ponerle cara, echarle en ídem su comportamiento y amargarme ese día y los siguientes.
Todo este tochaco lo suelto para que se vea que algunos niños ya vienen con el "equipamiento" de serie para ser unos cabrones. Y que está en poder de los padres hacerle ver que se deben compartir las cosas, insistiendo cuantas veces hagan falta.
No puedo evitar pensar que esos "críos" lo hicieron adrede... Van pidiendo por la calle en pandillas, acosando a turistas, y al que no ceda, le plantan un "accidente".
Que se ahorren el último boceto. Tomarán nota de lo que hicieron aquí: cunetas, o enterramientos directos, cuando no descuartizados/quemados/cementados.
#26 Gracias, pero sigo igual. ¿Ha habido alguna noticia-escándalo de este juez sobre absolución a algún acusado de pederastia de su misma cuerda política, o algo así?
Yo siempre he pensado que, para reducir la inmigración masiva, se deberían conocer las circunstancias y las causas que la provocan en los países de origen, y actuar contra ellas.
Por ej.: concentrar a todos los inmigrantes en varias salas y proyectarles una película doblada/subtitulada en sus idiomas, tipo "Rebelión en la granja" de Orwell, adaptada a los tiempos actuales, en las que informen de quiénes son los que causan la pobreza que los ha expulsado, se les muestren remedios y se les anime a volver y organizarse. Son SUS países, son SUS lugares de nacimiento, son SUS luchas, y deben mentalizarse de que, si quieren gozar de mejor nivel de vida, deben empezar a trabajar los cimientos (casi nunca mejor dicho). ¿Habrán muertos, dolor, destrucción...? Puede ser, pero también se les muestra en las mismas películas las luchas que en el pasado tuvieron las sociedades de los países destino.
Más que culpar al turista, habría que boicotear a las agencias de viajes que prometen el oro y el moro en sus propuestas de planes de turismo. Antes de lanzar chorritos de agua a los turistas, preguntarles a qué agencia de viajes han acudido, buscar en internet de quiénes son, sus dueños o directivos, buscarlos dónde viven y dónde están, y montar el pertinente escrache.
/ironic