#57 casi nadie sabía lo que estaba vendiendo realmente con el tema de las preferentes. Conozco varios directores de distintos bancos que también cayeron en ellas y se quedaron casi con una mano delante y otra detrás. Eran tan víctimas de ese producto como los propios clientes que les exigían la devolución de sus ahorros. Y ponerte de malas con los empleados de la banca, que al final son unos curritos, es una decisión muy estúpida por tu parte, porque cuando tengas algún problema con tu dinero los que te van a poder ayudar en algo son precisamente ellos, no la app chachi molona con unos menús primorosos.
#130 Déjale, nunca vas a conseguir convencerles de que ni Dinamarca, ni Singapur, Canadá, Australia, y otros países similares están a años luz de Rallolandia. Hasta Estados Unidos está lejos.
#25 Sí, y la mano de obra esclava de presos chinos y coreanos.. Claro, por eso ha sido tan barato fabricar en china, las multinacionales contentas, el gobierno chino también,.. y si te sales de la línea no te dejo fabricar ni vender aquí.. . y en europa y eua importando sus productos sin poner ninguna condición porque en los gobiernos pesa mas la presión de los que les interesa fabricar barato y vender caro en eua y europa, que los intereses de sus ciudadanos. Parece mentira que se haya dado cuenta antes la derecha que la izquierda. Aquellos tiempos de la izquierda antiglobalización..
#25 Ahora estan intentando cambiarlo, construyendo mas infraestructura ecologica que todo el planeta junto y reforestando como si el mañana no existiese, construyendo una red sanitaria, prohibiendo importacion de basura... tal como hizo europa tras la guerra mundial y como aun no ha hecho en temas ecologicos.
Respecto al recorte de derechos no se que decir, no he estado en china para opinar en primera persona pero veo que aqui estamos censurando canales, opiniones, acosando ya no a politicos sino a sus familias y haciendo desaparecer a periodistas simplemente por ir contra el discurso oficial.
No creo que estemos para darles consejos, mas bien estamos para dejar de mirarnos el ombligo y ponernos a currar en lo nuestro.