Por la misma razón por la que yo tengo mejor trabajo que mi amigo Enrique (cuando lo tiene) cuyos padres se han pasado toda la vida en el paro y viviendo en el peor barrio de la zona.
Los alumnos de clase alta normalmente piden ayuda más a menudo a los profesores ya que están acostumbrados a tener soporte y cuidados desde la cuna, lo que propicia que parezcan más motivados.
¿No te suena? Por el contrario los niños de la clase trabajadora creen que es de débiles pedir ayuda, razón por la que pasan más desapercibidos por sus profesores, con el consiguiente aumento de pérdida de contenidos y mayores posibilidades de equivocarse. Es el orgullo de la clase trabajadora pero que puede ser un impedimento para relacionarse mejor con sus maestros, y, en el futuro laboral, con sus superiores