Nos reconforta pensar en la imagen de un periodista de ABC o La Razón (con su corbata y su gomina cortijera, o su melena de mechas pepera y sus pendientes de perla) bajándose nuestros temas para posteriormente escucharlos en su Ipod o en su potente equipo Hi-fi. Como son periódicos serios, tan serios que no dudan ofrecer especiales a sus lectores en torno a la pasión de nuestro Señor Jesucristo, las mismas fechas en las que en Ginebra se pone en marcha el acelerador de partículas que simula el origen CIENTÍFICO del universo, el derroche de medios y el ejercicio de investigación periodística ha sido verdaderamente encomiable.