Los militares están obligados a acatar y callar. Y el presidente de gobierno está obligado a evitar que sujetos mediocres, simples, insustanciales, sin nivel, ni perfil, ni dimensión, ni experiencia ni nada de nada, lleguen a ministros.
Portada
mis comunidades
otras secciones
Reconozco que ando un poco justo en endocrinología, fisiología animal, etología y todas esas disciplinas con las que debería estar familiarizado quien quiera opinar sobre esto sin pasar por bocazas, pero admito que siempre me ha chocado que el toro insista en embestir al picador. ¿Por qué narices buscará con tanto denuedo un estímulo perfectamente evitable, si el estímulo, según dicen, es doloroso?