En un hentai que leía hace tiempo, Yura y Makoto (Historia de amor, lección de sexo, se subtitulaba... era más interesante que erótico, y la verdad que me gustaba), ya hablaban de eso. Matrimonios que llevaban casados relativamente poco tiempo, quizá cinco años, y eran "matrimonios sin sexo"... pero la expresión, iba más allá. Revelaba que un matrimonio sin sexo, en realidad, no eran un matrimonio, sino dos extraños compartiendo piso. Dos personas que poco menos se ignoraban mutuamente, y no tenían ningún interés, no ya en conocerse mutuamente, sino en conocer a NADIE. Vivían encerrados en su coraza de depresión y rutina, sin hacer ningún esfuerzo por salir.
No se trata de "no tener sexo", se trata de no tener conversación, ni diálogo, ni vida en común... se trata de llegar a casa, y que nadie te diga "hola". Se trata de sentarte a la mesa con alguien que no te mira a la cara; de compartir cama con alguien que se vuelve de lado sin decirte "duerme bien". Se trata de vivir forzosamente con alguien que no conoces, y a quien no te interesa conocer, y que tampoco tiene interés en conocerte a tí. Se trata de hacer sexo dos veces al año, sin ganas ni interés de ningún tipo, sólo porque es "lo que se espera de tí". Debe ser muy triste vivir así.
Japón es una de las sociedades, tecnólogica y científicamente, más avanzadas que existen... pero se están deshumanizando a pasos agigantados. Jóvenes que se alquilan a hombres con dinero, para hacerse pasar por sus hijas, en una extraña forma de "prostitución sin sexo", porque los hombres no quieren sexo, quieren fingir que tienen una hija, alguien a quien pueden ir a buscar al colegio o instituto, que les dirá "¡holá, papá!", les dará dos besos, y que les contará sus cosas, cómo lleva los estudios, y que les ESCUCHARÁ. Chicos jóvenes, estudiosos y cultos, que deciden enterrarse vivos en su cuarto, porque el mundo exterior no les ofrece nada, salvo una competitividad SALVAJE, una filosofía de "sé el mejor o muere; no nos importan las personas, si no tan sólo los resultados", a la que no quieren enfrentarse; una cultura en la que se ve "correcto" tener una mujer que dé hijos, y una amante que dé placer, y no hay chica que no desee casarse, pero tampoco hay chica que desee convertirse en el "propagador de código genético"; una sociedad terriblemente machista en muchos aspectos... Una sociedad que logró vencer maravillosamente las dificultades dejadas por la 2 Guerra mundial, pero que tal vez, sólo tal vez, pagó por ello un precio demasiado alto.
"Women are not actually attracted to men, There is a vague idea of what a man is physically, and some are better than others
aesthically speaking but the purely physical appearance of a man is almost inconsequential unless he is horriby ugly or
outrageously attractive.
Women are attracted to status, money, how much a man smiles and laughs, how many friends and resources a man has, how full a
man's life is --how many "cool," "exciting" and prestigious things he is doing or connected to.
They are interested in how other people view him --how many people want to be around him, how other people interact with him and
whether their interactions convey that he is specially amazing. They want him to be extremly outgoing and aggressive, they want him to demonstrate
his status over other people by dominating them in various non-violent ways.
A woman's attraction to a man is a function of her jelousy at the thought of another woman having that man. She doesn't care who he actually is or
EXACTLY what he looks like physically, she only cares about the VALUE of the life he has constructed around himself.
A woman basically is a greedy materialistic prostitute. Although that sounds vulgar, it's true. She trades her physically self to buy into the sucess a man
has created for himself"
El problema nunca ha sido la bancarrota de un banco. El problema ha sido el riesgo que cayeran uno detrás de otro y se creara un clima de pánico, el cual desencadena una retirada de fondos masiva por parte de los clientes, fondos que no existen debido a que el sistema económico se sustenta en la deuda.
Esta sucesión de hechos llevarían a la pérdida de valor de la moneda y la hiperinflación. Veríamos como cada día, literalmente, los productos son más caros que el día anterior. Una subida imparable y un empobrecimiento general de la sociedad.
Nunca se ha querido salvar a los bancos, a quien se ha querido salvar es al sistema financiero.
Por lo tanto si se prevee que la caída de uno o varios bancos puede suponer el hundimiento de la economía la decisión de salvarlos "al precio que sea" es la única decisión razonable.
Los únicos que no querrían salvar los bancos en ese supuesto serían los que están en contra de la sociedad actual y quieren hundirla para que, supuestamente, resurja de las cenizas una mejor.
El problema que tenemos en España es de los españoles, no es de los políticos, ni de los constructores, ni de los banqueros, ni de los sindicalistas, ni de los artistas, ni de Belén Esteban, ni de Laporta, ni de nadie. Es de todos los españoles. Somos una nación de vividores, el país de la picaresca. Acusamos con el dedo: mira qué hace Fabra, mira qué hace Zapatero. Pero son pocos los españoles que en su lugar no harían lo mismo. La única diferencia es que nosotros no tenemos el poder que ellos tienen y por eso hacemos menos daño. Pero la prueba de que haríamos lo mismo es que en nuestra vida diaria no nos comportamos honestamente, basta como ejemplo el video de los paraguas en la feria de Fitur. Si podemos copiar en los exámenos lo hacemos (en EE.UU. si tus compañeros se enteran de que copiaste en un examen no te hablan hasta que confieses al profesor). Falsificar facturas para conseguir subvenciones está a la orden del día en muchas empresas. Etc. Etc. Etc. Aquí la chulería está bien vista y ser más listillo que nadie mucho más. En España sólo nos pueden ir bien las cosas si vendemos la vaca y/o actuamos con picaresca. Como pasó con el España va bien de Aznar. Barra libre a los constructores, que la gente se enduede hasta las cejas, y vendamos cuanta empresa pública tengamos. Otros países basan su crecimiento en otros parámetros, pero para eso se nos olvida lo maś importante: la gente.
Como muestra vale un botón: la puntualidad. La cantidad de lios y discusiones que he tenido y tendré con algunos amigos por la puta manía de no llegar a tiempo a las citas a las que uno mismo se comprometió. Pero es un tema sin solución. No hay forma humana posible de que el español medio llegue a tiempo a una cita. Un familiar mio estuvo en Holanda con su pareja de vacaciones y fueron a tomar un tren y el tren cerró las puertas tan puntualmente que mi familiar entró y su pareja se quedó fuera y eso que iba a un metro detrás de él. Nos puede parecer exagerado pero el tren no tiene por qué salir ni un segundo tarde porque a un viajero no le dé la real gana de levantarse del banco a tiempo. Que se quede en tierra.
En fin, que si los políticos alemanes vienesen a gobernar este país no iban a conseguir mucho porque el pueblo no iba a estar a la altura. Tenemos que ser nosotros quienes lo hagamos.
Los jóvenes hoy en día son unos tiranos. Contradicen a sus padres, devoran su comida, y le faltan al respeto a sus maestros (Sócrates 400 a.C.)
¿Qué les pasa a nuestros jóvenes? No respetan a sus mayores, desobedecen a sus padres. Ignoran las leyes. Hacen disturbios enlas calles inflamadas con pensamientos salvajes. Su moralidad decae. ¿Qué será de ellos? (Platón 400 a.C.)
No veo esperanza para el futuro de nuestra gente si dependen de la frívola juventud de hoy en día, pues ciertamente todos los jóvenes son salvajes más allá de las palabras… Cuando yo era joven, nos enseñaban a ser discretos y respetar a los mayores, pero los jóvenes actuales son excesivamente ofensivos e impacientes a las restricciones. (Hesíodo 700 a.C.)
A mí me sucedió un caso parecido en AirLingus, con los que ya he viajado varias veces. Volvía de Dublín y a mi lado se sentaron un niño y una niña de unos 12 años. Los padres estaban delante, con otro niño más pequeño. Entonces cuando el avión cerró las puertas una azafata se me acercó y amablemente me preguntó si quería sentarme en otro sitio que estaba vacío más adelante. La movida es que yo había pagado los 5€ para elegir mi asiento (última fila en ventanilla), así que amablemente le dije que no, que había pagado por estar ahí. Lo curioso es que mientras hablábamos todos el mundo me estaba mirando, sobretodo los padres. Así que empecé a sospechar. Abiertamente le pregunté que si había algún problema en que yo estuviera allí. Se puso roja y me explicó que no estaba bien visto que un señor mi edad se sentara al lado de niños tan jóvenes. Lo entendí, flipando en colores pero lo entendí. Mientras me cambiaba de sitio los padres de los niños no paraban de pedirme perdón, a lo que yo les respondía que no había problema ninguno (la verdad es que venía echo polvo y me importaba una mierda). Todo el asunto quedó solucionado en un plis plas cuando nada más llegar a mi asiento nuevo vi lo que me esperaba: una botella de vino cortesía de la compañía y una fémina irlandesa ávida de latin lover. "A que no sabes lo que me acaba de pasar" le dije nada más sentarme. :)
#107, esperemos que las opiniones de Fidel Castro no desmerezcan mucho tu juicio sobre ellas, ya que su padre era un rico hacendado. O Gandhi, hijo del primer Ministro de una provincia india.
Vamos, que no tiene nada que ver una cosa con otra.
#4 AlexGuevara 
:) 
