#26 Podrás sustituirlas cuándo apruebes las oposiciones, y para eso vas a necesitar un mejor conocimiento del español, pues a las mencionadas funcionarias no se las puede "hechar", en todo caso se las puede "echar". Te lo digo sin acritud, tan sólo para tu información, por lo que sé las oposiciones al grupo "A" no las regalan.
#43 Perdona, compañero, pero no te creo, no te voy a decir que te lo inventes, pero digamos que le doy tanta credibilidad a lo que cuentas como la que tú me darías a mi si te dijera que todos los externos de empresas privadas que trabajan en la Administración son vagos que tan solo aspiran a quedarse como funcionarios y, cuando lo consiguen, son desde el primer minuto como el funcionario arquetípico del tópico, vago redomado.
Aquí se ve mucho lugar común sobre los funcionarios, mucho comentario insultante y mucho comentario cainita a la española, es decir, sin saber de la misa la media. No hay duda de que la Administración tiene problemas, pero gran parte de su personal trabaja con dedicación e interés por un sueldo bajo que ahora mucha gente envidia de la misma forma que antes, cuando todos parecían nadar en la abundancia, despreciaban.
Está claro que hay sitios donde sobran, pero no creo que sea culpa de ellos. Sí, por ejemplo, el famoso Baltar de la Diputación de Lugo se dedica a crear plazas para pagar favores políticos o colocar a militantes, error, si lo hace falseando el sistema de oposición que ha de estar basado en los principios de igualdad, mérito y oportunidad, peor, y si se lo consienten sus conciudadanos, trágico. Lo que si os puedo garantizar es que faltan policías, médicos, enfermeras y maestros para poder siquiera acercarnos al nivel que nos correspondería en relación a nuestro supuesto nivel de riqueza.
En todo caso, no merece la pena defender el fuerte. Hace tiempo que la opinión pública decidió seguir el criterio interesado de aquellos que solo tratan de minar todo lo que no les interesa, todo lo público. Sabéis una cosa, hay mucha gente honrada que hace su trabajo, cumple sus horarios y se esfuerza en mejorar su vida y la de los demás desde el sector público, lo mínimo que merecen es un poco de respeto.