- Señor alcalde, tenía que declarar hoy su patrimonio
- Vaaaaaya pues se me olvidó, diga usted que se lo ha comido el perro y que no se preocupen que tampoco es para tanto.
Por dios pero esto es que es surrealista, hacerle eso a tu propia hija es de monstruos y por mi parte ya se puede ir pillando un buen puesto en la carcel (por no decir algo mas basto, porque me hierve la sangre cuando veo cosas asi).