Mi propia experiencia con mi noche en un calabozo. Se acercaban las vacaciones de verano. Y como cada año de esta época, sabíamos que algo pasaría en relación con mi hijo. Las vacaciones de verano siempre se adelantan con una sorpresa. No ha fallado en los años anteriores y siempre llegaba una denuncia justo para intentar evitar que mi hijo pasa unos días conmigo y mi familia. Es toda una unidad cósmica igual que el gofio no puede faltar en el potaje de berros.
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