En Torrevieja, medio coche quedó sumergido en la piscina infantil de un hotel después de romper el muro. El conductor, un joven letón de 19 años que cuadriplicaba la tasa de alcohol, circulaba a gran velocidad. En ese momento no había nadie en las instalaciones y no hubo heridos. Los clientes continúan esperando a que saquen el vehículo del agua porque todavía sigue allí.