La concentración de nitratos ha aumentado un 39% en los últimos tres años a consecuencia de las 400 instalaciones ganaderas intensivas que se acumulan en la zona, convirtiendo el agua en no potable y provocando también que el baño no sea aconsejable. El problema está en los residuos ganaderos -purines y abono- generados por el gran número de granjas de producción intensiva.
|
etiquetas: purines , macrogranjas , contaminación , acuíferos , limia , agua