Sin lluvia suficiente en primavera, los campos españoles producirán en 2023 menos alimentos que otros años. Y en un mercado abierto como el nuestro, cuando la oferta disponible baja y la demanda se mantiene o crece, los precios tienden a subir. Así que la España que ya encadena dos años de sequía, debería prepararse para ese golpe al bolsillo.
|
etiquetas: sequía , consecuencias , españa