Una vez uno de ellos estaba en el suelo, tanto el condenado como sus acompañantes siguieron golpeándole e insultándole, llamándole nuevamente 'maricón' por su orientación sexual
no llega a 200 pavos, un cursito y te libras de la carcel, esperemos que ahora nos unamos todos y si digamos que el sistema que tenemos en España penalmente es una puta mierda