(...) Cuando el Tribunal de Cuentas requirió los justificantes de los gastos, el que fuera ‘embajador’ de Cataluña en Londres, Sergi Marcén, respondió que “en el mes de junio de 2017, después de realizar unas actuaciones de adecuación de la delegación, la persona contratada para la limpieza tiró por error toda la documentación correspondiente a la gestión económica donde estaban los originales de las facturas de 2016 y hasta el 31 de mayo de 2017.
|
etiquetas: embajadas catalanas , corrupción , nacionalismo , casualidad