Recientes imágenes por satélite muestran como las bases militares están cambiando para almacenar un nuevo tipo de armamento. Misiles nucleares de corto alcance, al estilo de los
Davy Crockett, que pueden ser desplegados en el campo de batalla y ser empleados con fines tácticos diversos. Los nuevos misiles W76 pueden ser configurados para elegir su potencia destructiva y ser empleados tanto para destruir una ciudad como para simplemente frenar el avance de la línea enemiga.