Intentando a duras penas contener los gritos de júbilo, Javier Gumón, un guardia de seguridad de 53 años, apenas ha sabido contener su alegría al comunicar a su familia que le acababan de llamar de la central y le tocaría trabajar esta Nochebuena. “Malas noticias, familia, malas noticias…”, ha mentido mirando a los rostros de sus familiares, que ha detectado al segundo que estaba eufórico por dentro, según han confirmado ellos mismos a la prensa.
|
etiquetas: trabajar , nochebuena , alegria
Un truco: solamente hay que esforzarse al principio y al final, que son los momentos que la gente mas recuerda. En el medio se puede hacer lo se quiera