El milagro económico del paraíso neoliberal español tendría como efectos colaterales el incremento desmesurado del trabajo precario en España (6 millones de personas), la desaparición del mito del puesto de trabajo vitalicio (tasa 90% de contratación parcial) y progresiva pérdida de poder adquisitivo de asalariados y pensionistas. De seguir obviando la inversión en I+D, España podría convertirse en la próxima década en un país tercermundista a nivel de investigación e innovación,condenado a comprar patentes extranjeras y producir productos..