El juzgado intentó citarla para hacerle el ofrecimiento de acciones como perjudicada, pero no está localizable. El temor a los agresores y las secuelas psicológicas que arrastra parecen estar condicionándola. El magistrado ha dictado sendas órdenes para que ninguno de ellos se aproxime o intente contactar con la joven. Y la misma prohibición ha impuesto a la novia de uno de los encarcelados, quien también fue detenida la semana pasada por un delito de amenazas, ya que habría telefoneado a la víctima para amedrentarla.
|
etiquetas: dominican dont play , violación , zaragoza