En un dictamen preliminar, la Comisión Europea considera que el modelo publicitario de "pago o consentimiento" que se lanzó el año pasado para los usuarios de Facebook e Instagram infringe el artículo 5.2 de la DMA al no ofrecer a los usuarios una tercera opción que utilice menos datos para la segmentación publicitaria pero que siga siendo de uso gratuito.