La cría artificial de perros, también conocida como cría selectiva o cría planificada, es una práctica en la que se seleccionan y cruzan específicamente perros con ciertas características para perpetuar o mejorar esas características en la descendencia. Si bien esta práctica puede tener ciertos beneficios, como producir perros con temperamentos más predecibles o características físicas deseadas, también puede tener varias consecuencias negativas y hay varias razas de perros que los veterinarios no recomiendan nunca.