En su momento, Hilda Luis argumentó que el maltrato a los animales domésticos no sólo representa un acto de crueldad hacia un ser vivo, sino que en los hogares donde se ha detectado alguna mascota maltratada es un “foco rojo” de violencia familiar, por ello la necesidad de erradicar estos actos. La propuesta fue turnada por el pleno a la Comisión permanente de Estudios Constitucionales para su estudio.