La historia que hay (o habrá, casi con toda seguridad) detrás del asesinato de Brian Thompson, CEO de UnitedHealthcare, una gran compañía aseguradora norteamericana, no es nueva. De hecho, hay hasta una película "The Rainmaker", retitulada en España como "Legítima defensa", de 1997 y basada en una novela de John Grisham (7,2 en IMDB), que ya hablaba del tema: cómo las compañías aseguradoras están pensadas no para dar el servicio por el que se les paga, sino, básicamente, para hacer dinero. La salud de sus clientes es secundario.
En ella, (¡OJO, SPOILER!) se muestra como una compañía similar a la del asesinado tenía, en su manual de atención al cliente, una sección dedicada a cómo denegar al cliente cualquier reclamación, cualquier petición de asistencia sanitaria, de entrada. A TODOS. Calculaban que con ello se ahorraban entre un 10 y un 15 por ciento de todas las reclamaciones, entre las que realmente no eran válidas, y por eso no insisten, y las que si lo eran, pero sus titulares no conocen bien sus derechos, se echan atrás ante una gran corporación, son personas que no quieren, no saben, no pueden, no se atreven a reclamar más……
Sí, sé que es una película de ficción, pero resulta que es exactamente lo que hacía la compañía del asesinado, pero peor. Es más, se calcula que esta compañía se ahorraba el pago de hasta el 32% de las reclamaciones, o aplicaba atención mediante IA para desestimar, de entrada, el 90% de las reclamaciones.
Pero es que no es siquiera la única película en mencionarlo. Más recientemente, el documental "Sicko" de Michael Moore (2007; 8,0 en IMDB), habla de la Sanidad para aquellos norteamericanos que SÍ tienen seguro (no quiero ni pensar cómo debe ser para aquellos que no tienen): cómo jubilados, que es cuando más atención necesitas, tienen que vender sus casas e irse a vivir a casa de sus hijos o a una caravana, o tienen que volver a trabajar, con 70, 80 años, para poder pagar tratamientos que sus seguros no les cubren. Por ejemplo, tratamientos largos, como los de cáncer o similares. En el documental se ve también algún ejemplo de lo que hacen con aquellos que no tienen seguro, algo que dicen que es ilegal hacer, pero está filmado: abandonarlos en la calle. No serán todos, es más, puede que sea sólo algún caso individual, pero esa persona concreta, una persona enferma, ha sido expulsada del hospital por su personal y abandonada en el exterior.
Alguien podría decir de los que tienen seguro y no les cubre todo: "que hubieran pagado más y tendrían una atención mejor". Bien, es una opción. Y es también una manera de discriminación brutal: si tienes dinero, te salvas, si no lo tienes, palmas, o tu calidad de vida será mucho peor, y tu esperanza de vida, mucho más baja, y tus apuros para seguir vivo, mucho peores. Y puede que sea no que no hayas querido pagar más, puede ser que no hayas podido. Y los que no tengan seguro…………
El caso es que Estados Unidos es (datos del 2020) EL SEGUNDO en el ranking de países por su gasto en Sanidad (para los curiosos, el primero es Tuvalu, un país insular en Oceanía de 26 Km² y doce mil habitantes), con un 17,1% de su P.I.B. y, sin embargo, sus indicadores sanitarios no reflejan semejante gasto. Por ejemplo:
- Expectativa de vida al nacer: 80,27 años (posición 45)
- Mortalidad infantil: 5,28 muertes/1000 nacidos (posición 55)
- Mortalidad materna: 19 muertes / 100.000 niños nacidos vivos (posición 55)
Para que hacerse una idea, España gasta el 8,9% del P.I.B., casi la mitad, y está mejor en TODOS esos marcadores.
El problema del sistema sanitario norteamericano y de los abusos que comete no es nuevo, ni tampoco los de la industria farmaceútica (por ejemplo, vender drogas adictivas como remedios para el dolor intenso, sabiendo que eran adictivas, creando un enorme problema de salud pública por consumo de drogas del que el actual problema con el fentanilo es heredero, o como comprar la patente de un medicamento para, al día siguiente, multiplicar su precio un 5500% [x55]-aunque éste parece ha pagado judicialmente-), así que no es de extrañar que una buena parte de los norteamericanos sientan cero empatía por la muerte de este CEO.
Como ha dicho alguno en redes con sarcasmo, "tener empatía no está cubierto por mi seguro…"