Ella murió trágicamente cuando fue atacada violentamente por una avispa en el oeste de Australia. Lo que hace que su historia sea notable es que hasta su muerte, esta araña trampa fue la araña más antigua conocida en el mundo. Las arañas Trapdoor se llaman así porque no tejen webs como muchas otras. En su lugar, viven bajo tierra y construyen una trampilla en forma de corcho con tierra, vegetación y seda, que usan para atrapar insectos. La vida útil de una araña trampa es de entre cinco y 20 años.