En agosto de 1995 un hombre llamado Foutanga Babani Sissoko entró a la oficina central del Banco Islámico de Dubái (DIB), en la capital del emirato con el mismo nombre, y solicitó un préstamo para comprar un auto. El gerente, Mohammed Ayoub, aceptó y Sissoko lo invitó a cenar a su casa. Durante la cena, Sissoko sorprendió al gerente del banco asegurándole que tenía poderes mágicos y que con ellos podía duplicar cualquier suma de dinero. El gerente del banco cayó en el engaño. Le estafaron 242 millones.
Comentarios
O sea que la magia funcionó
Era el momento perfecto para decirle:
Muy bien, caballero, le prestaré entonces 1 dolar con un interés del 10000%, usando su magia podrá conseguir el dinero para el coche y además pagar los intereses y hacerse rico. Un placer hacer negocios con usted.
Hay que ser un banquero muy muy tonto para creerse tamaña tontería.
En Valencia, o Alicante, hace unos diez años engañaron con el mismo truco a un director de banco. No le sacaron tanto.
Esta tipo de estafa, duplicar dinero, fue idea de victor lusting y su maquina del dinero https://es.wikipedia.org/wiki/Victor_Lustig