El funcionamiento de las baterías de ión-litio depende de un flujo de iones de litio entre el ánodo (-) y el cátodo (+). El ánodo es generalmente un polo de grafito o carbono duro mientras que el cátodo puede tener una composición diferente para aceptar iones litios: óxido de cobalto (ICR o LCO),óxido de manganeso (IMR u OVM) o fosfato de hierro (IFR o LFP).El material del cátodo es determinante para el rendimiento, la fiabilidad y la seguridad.