Seis de cada 10 niños, niñas y adolescentes han sido víctimas de algún tipo de violencia en Paraguay, "principalmente en su entorno más cercano", indicaron desde la Coordinadora por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia (CDIA). La CDIA alerta además de que esas cifras se ven alimentadas por prácticas como el criadazgo, una forma de trabajo doméstico que afecta a menores, y que ha vuelto a sacudir al país tras el caso de una adolescente que está internada por ingerir sosa cáustica, supuestamente obligada por sus empleadores.