Las propiedades del principal componente alucinógeno, el THC, se conocen desde hace años, pero una investigación entre los componentes similares derivados del cannabis, conocidos como cannabinoides, ha sido limitada. Esta nueva investigación demuestra que los cannabinoides pueden actuar como efectivos agentes anticancerígenos. De seis cannabinoides estudiados, cada uno demostró propiedades anticancerígenas como las vistas en el THC y, lo que es más importante, su efecto sobre las células cancerígenas se incrementaba al combinarse entre sí.