El estudio Hassell Architects ha diseñado un complejo impresionante en Hangzhou, China, sustentable y basado en la idea de la interconexión. Para lograrlo ha unido las distintas estructuras mediante un techo adornado de celosía, que envuelve su exterior y sirve como sombrilla. Se habrán fijado en la foto, así que no hará falta ni decirlo pero por si acaso, el efecto visual es brutal. Da la sensación de que la sede fue diseñada con el fin de socializar personas, o bueno, mejor dicho, en este caso trabajadores, y ‘conectarlos’ entre sí