Se ha dado un cambio significativo en el vocabulario político del país. Hasta las pasadas elecciones, el concepto de voto inútil servía para calificar el apoyo testimonial a una opción minoritaria. En una realidad marcada por la hipocresía estructural, puesta en evidencia por Wikileaks, quedan todavía votantes de izquierdas que, al margen de las coyunturas y las mayorías, intentan dejar en la urna sus sentimientos verdaderos. Estos ciudadanos eran hasta ahora los dueños del voto inútil. Pero las cosas han cambiado en el último curso político.
|
etiquetas: psoe , pp , iu , voto inútil , mercados , liberalismo , democracia