edición general
2 meneos
 

George C. Scott, la interpretación como huida

George C. Scott se alistó en la Marina estadounidense en 1945, poco antes de que la bomba atómica desfigurase el rostro de la humanidad. No llegó a entrar en combate y fue destinado al cementerio de Arlington, donde cada día aterrizaban los cadáveres de jóvenes soldados asesinados en Europa y el Pacífico. Scott cayó en depresión y se sumergió en manantiales de alcohol. La imagen que en aquella época le devolvía el espejo era tan desoladora que Scott se interesó por la interpretación, como medio para huir de sí mismo.

| etiquetas: cine , oscar

menéame