La Isla de Mana, cerca de Nueva Zelanda, era el hogar del pájaro más solitario del mundo: Nigel, un alcatraz que acudió a los cánticos emitidos por los conservacionistas en 2013 y que, casi un lustro después, justo cuando algunos congéneres llegaban a hacerle compañía, ha fallecido sin llegar a hacer amigos.
|
etiquetas: aves , animales , biología , conservación