Cuatro meses después de que Moreno finalizara una huelga de hambre de 17 días para reclamar los más de 1,6 millones que, según él, le debe La Caixa, y que se gastó en licencias de obras, el promotor inmobiliario confirma que no seguirá adelante con su plan de viviendas (restringido a los municipios de Fuenlabrada, Pinto y Carranque, en Toledo) por la "falta de apoyo" de la entidad financiera y, sobre todo, de los cooperativistas. "Nosotros ya damos la pasta por perdida", afirma uno de los afectados.