La policía local de Vigo, detuvo a un vigués de 33 años, con una esvástica nazi tatuada en una pierna, que golpeó a dos agentes que mediaron en una pelea que mantuvo con un senegalés después de preguntarle por la localización de un burdel... Finalmente, los agentes consiguieron tranquilizarlo y lo invitaron a abandonar el portal, lo que consiguieron después de un momento y más amenazas. Justo cuando los agentes se iban hacia el coche patrulla el ahora detenido volvió a lanzarse contra su victima.