Otros cuatro hombres han sido condenados a penas de cárcel por uno de los abusos cometidos: una niña de doce años a la forzaron a tener relaciones sexuales en repetidas ocasiones. Si la menor se negaba la agredían con violencia. El cabecilla del grupo, Mohammed Ali Sultan, acumula penas por delitos similares anteriores. El juicio se enmarca dentro de un proceso contra las bandas de pederastas o depredadores sexuales conocidas como
"grooming gangs"