La pequeña localidad de Loroñe, en Colunga, vive días de tensión ante la concentración convocada este domingo a las doce de la mañana para exigir justicia por la muerte de un perro de la raza Yorkshire. Los hechos se remontan a principios de mes, cuando una mujer denunció las malas condiciones que presentaba el animal, que desapareció días después y cuyos restos no han aparecido.
"Queremos que esto se sepa y que paguen lo que están haciendo para que no tengan nunca más animales a su cargo", señala la promotora de la concentración, que denuncia que está recibiendo amenazas de vecinos del pueblo por dar a conocer estos hechos.
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Es lo que pasa, los maltratadores de animales son violentos con los animales y las personas.
"Queremos que esto se sepa y que paguen lo que están haciendo para que no tengan nunca más animales a su cargo", señala la promotora de la concentración, que denuncia que está recibiendo amenazas de vecinos del pueblo por dar a conocer estos hechos.