Es inevitable pasar por un aula, gasto que cuesta a las arcas públicas 5.988 por alumno y año en Infantil, 6.066 en Primaria. Más allá de becas y ayudas diversas, claro. Todo eso –no contemos pensiones, prestaciones por desempleo, etc– sale de lo que, más a gusto o a disgusto, pagamos al Estado. No es gratis. Y muy pocos podrían permitírselo de tener que afrontarlo directamente.
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