Un estudio realizado con imágenes por satélite en más de 8.000 lugares repartidos por todo el mundo demuestra que, cuanto pastan, las vacas domésticas -y también los ciervos silvestres- orientan su cuerpo en dirección Norte-Sur, con la cabeza mirando al norte. Y concretamente se orientan en relación al norte magnético, no al norte geográfico.
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etiquetas: animales , campos magnéticos , norte , sur
Vaya cosas tienes !!
todas las aves y los que volamos en libre para despegar y aterrizar lo hacemos contra el viento por la sencilla razón de que es la manera mas fácil de despegar y aterrizar, con lo de las vacas lo mismo, es el viento el que las condiciona la posición de pastar o tumbarse.
que observen las zonas donde el viento predominante es oeste-este y luego me cuenten los resultados de su estudio.
Lo de que los perros también son capaces de detectarlo y hacen sus necesidades en el eje norte-sur ya también sabe desde hace años y si te interesa aquí tienes el paper:
www.frontiersinzoology.com/content/pdf/1742-9994-10-80.pdf
Saludos
Una de 2012: blog.rtve.es/retiario/2012/02/las-vacas-brújula-o-lo-que-no-sabemos.h
www.futilitycloset.com/2012/02/14/beef-tack/
German zoologist Sabine Begall studied thousands of Google Earth images and discovered that both types of animals appear to align their bodies with magnetic north. The conclusion “appears to be quite clear-cut from the data,” observed ornithologist Wolfgang Wiltschko.
El artículo de 2008:… » ver todo el comentario
la vista es la que trabaja.
la dirección en la que pastan las vacas, aterrizan los patos y defecan los perros no es norte-sur y eso lo averiguara cualquier persona con ojos y tiempo para observar lo que le rodea.
#18 Igual me pasa a mi. Menudo perrazo.. Era tan inteligente...
Nos lo regaló un cliente de Nerja. La madre de Mittwoch era sargento de la policia de Colonía
Como le recogía la caca con unos periódicos (80s, nadie recogía nada) era graciosísmo verme averiguando donde se iba a posar. Si hubiera sabido lo del norte..
*me contaron los viejos del pueblo que los cabrones le metían una guindilla en el culo a los perros y no paraban de correr y dar vueltas, desconozco si es cierto pero yo les creí.